Que no me jodan. No somos iguales. No somos mejores, tampoco somos peores. Somos un género puteado hasta por la propia naturaleza. Y que vengan los hombres y me lo nieguen ahora.

Negadme que se nos educa para tener niños desde pequeñas, negadme que tenemos en nuestras manos la responsabilidad de dar a luz (con dolor) a todo el jodido planeta. Negadme que todos los puñeteros meses de la mayoría de nuestra vida sin comerlo ni beberlo nos toca ser otras, otras que no queremos ser, otras tristes, débiles y dolidas. ¿Vuestra vida de "hago lo que me sale de la polla total ellas me lo van a consentir siempre" es mala? Venga ya, chavales.

Nos toca estudiar lo mismo que a vosotros, trabajar lo mismo que a vosotros (a veces no nos quieren contratar no sea que nuestro instinto maternal nos nuble el sentido y se vaya a cagar la productividad), pelear lo mismo que vosotros, y encima vamos y una vez al mes nos ponemos a llorar sin razón alguna. ¿Os creéis que esto es fácil? ¿Os pensáis que es divertido ser una persona diferente sin pedirlo? ¿Nos habéis visto cara de masoquistas?

Nunca habrá igualdad, porque nosotras lo tenemos peor y eso jamás lo entenderéis y aceptaréis ya que vuestro fuerte no es la empatía. Y sí, soy radical. Las hormonas me ponen así, ¿podéis decir vosotros lo mismo, miembros del género con el control de sus propias emociones? Pues eso.